Llegar al Circuito Inferior desde abajo mismo es una húmeda experiencia: bajamos de la lancha después de la Gran Aventura, nos escurrimos un poco y empezamos a caminar por el sendero con mucho cuidado.
Este parte del circuito no es apta para personas con movilidad reducida, sillas de ruedas, cochecitos de bebé, por lo irregular del terrero y porque hay varias escaleras sin rampas.
Eso sí, el agua está ahí cerquita...
El sendero sigue por abajo hasta casi ubicarse debajo de los saltos.
El ruido ensordece y la bruma tan agradable que te cala hasta los huesos.
Y ya volviendo por el sendero al costado del agua, empieza una empinada subida para encontrarse con el recorrido dentro de la selva.
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| Salto Dos Hermanos visto desde el Circuito Inferior |
Esta parte ya no tiene tantos desniveles, hay mayor accesibilidad y es posible encontrarse con algunos amigos... o no tanto.
Ojo con alimentar a los coatíes.
Si bien hay cartelería por todos lados y avisos varios, hay quienes se sienten en la libertad de que un animal los lastime. Y bue...
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| Simpáticos de lejos. NO LOS ALIMENTEN ni dejen comida a la vista |
Como siempre, indicaciones por todos lados.
Eran pasadas las 2 de la tarde así que volvimos a la zona de descanso para almorzar usar los baños y prepararnos para el final: GARGANTA DEL DIABLO.
Les dejo el enlace a la página oficial del parque con mucha información del CIRCUITO INFERIOR.
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