Hace 6 meses, con más dudas que certezas, y aprovechando algunas promociones que aparecieron en el medio de esos ciber monday que inventan en Argentina, compré pasajes a Tokio.
(Fue a partir de promociones que sacó Ethiopian y buscando y rebuscando
en Turismocity y armando itinerarios que me servían en fechas)
De tenerlo en mi bucket list, ahí quietito, agazapado, siempre en el terreno de los sueños, pasó al frente. ¡¡¡Me voy a Japón!!!
Nunca he ido a Asia y hoy es el día.
Lo más "al este" que he estado en este globo terráqueo es Berlín. Así que es todo un gran viaje.
Y porque JUSTO la combinación de vuelos que conseguí *guiño, guiño* pasa de regreso por Nueva York, hago doblete.
En el medio de llegar a continente, país y ciudad nueva, voy a subirme a dos aerolíneas con las que nunca he viajado, American Airlines y Japan Airlines.
Voy a conocer dos aeropuertos, LAX y HND, Los Ángeles y Haneda.
Tokio, TODO NUEVO.
En un primer momento, estuve averiguando para hacer tours o alguna excursión o paseo con guías o agencias en español pero, aún sin que me bajaran los nervios ni la adrenalina, decidí animarme a andar sola y a las señas.
Caída libre.
Cuatro vuelos long-haul en economy para templar el carácter.
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| Más preparada que jachallero, llevo cubiertos descartables, como leí en alguno de los cientos de blogs que he estado usando de apoyo moral. |
Nueva York es mi hogar fuera de casa.
Vuelvo por segunda vez en la semana de Acción de Gracias, como en el 2016. Y, como siempre, esa ciudad maldita se renueva y siempre hay algo nuevo para hacer, pasear por lugares entrañables y conocer otros.
En la medida de lo posible, voy a ir compartiendo en instagram y twitter, así que me buscan por ahí.
Por muchas más primeras veces, live long and travel!
See ya!
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