Parque Nacional Iguazú, la Gran Aventura.

Como les había contado en este POST, a la entrada del parque, contratamos con la empresa Iguazú Jungle uno de los paseos que ofrecen, la GRAN AVENTURA.

Por $950 (unos U$55 a mediados de agosto 2017) pueden llevarse en sus estómagos varios mililitros de agua del río. La excursión se puede pagar con tarjeta (crédito o débito) o efectivo.

Según definan cuando lo contratan, pueden salir desde el Centro de Visitantes o desde la Central Operativa. Nosotras salimos desde la Central, que está a unos pasos del Viejo Hotel Cataratas.

Existen varias restricciones, tanto de edad como de salud y estado físico: pueden ver las características de la excursión ACÁ.

Este paseo combina un recorrido por la selva en vehículo (un guía va explicando, en español e inglés, particularidades del terreno, flora, fauna y datos del parque), después una caminata y descenso (o ascenso si hacen el recorrido al revés) por la selva para llegar al amarradero y un paseo en lancha para terminar ¡¡¡debajo mismo del Salto San Martín mojados hasta los pensamientos!!!

Para esta hora, cerca del mediodía, se había nublado un poco, lo que hizo más agradable el paseo...

La empresa no provee de capas de agua pero sí de bolsos para guardar los objetos personales y el calzado para protegerlos de lo que se viene...

Nos colocaron los flotadores y a ubicarnos en los asientos para empezar a navegar el cañón del Iguazú inferior.

Brasil a la izquierda, Argentina a la derecha y ya estamos más cerca...

Salto Tres Mosqueteros

Un pequeño descanso para sacar fotos antes del Bautismo.

¡¡¡Y el resto lo tendrán que experimentar!!! Uno queda chiquito ante la potencia de la naturaleza... segundos que te hacen encomendarte a la Pachamama!!!

La lancha nos dejó en el muelle frente a la isla San Martín para estrujarnos un poco y enganchar el Circuito Inferior. IM-PO-NEN-TE.

Solo queda caminar con cuidado por esa zona y disfrutar del paisaje.

Ruge y brama. Increíble.